Un plan:
En cada final encontrar un nuevo comienzo, un punto de partida hacia algo aún mejor. Sin grises.
Cada mañana abrir los ojos y pensar que ayer estuvo bien, pero seguramente hoy va a ser mejor. Salir caminar por las mismas calles y descubrir algo nuevo, una ventana, un balcón, una puerta...
Conmigo llevo las cosas que no cambian porque están conectadas por mas de un punto, llevo amigos, llevo música, tabla y libros... Llevo la alegría de saber que los días los estoy construyendo de a uno, sin apuros...





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